Desde la presunta ingerencia rusa en las elecciones presidenciales norteamericanas de hace dos años, la compañía ha ido encadenando un escándalo tras otro hasta el punto de que los inversores han perdido la paciencia y han pedido públicamente la cabeza de Mark Zuckerberg.
Los principales fondos de inversión públicos estadounidenses han emitido un comunicado en el que han animando al resto de accionistas a forzar la dimisión de Mark Zuckerberg como Presidente de la Junta Directiva de Facebook tras las numerosas crisis que la empresa ha tenido que afrontar en los últimos meses, que se han traducido en una drástica caída del valor de sus acciones en Bolsa.
Los firmantes de la carta representan una inversión de dinero público de cientos de miles de millones de dólares en la compañía que proviene de las arcas estatales y la alcancia de las pensiones. Entre ellos se encuentran fondos procedentes de los estados de Rhode Island, Illinois, Pennsylvania y la ciudad de Nueva York.