El pequeño Pediatric Hal, un nuevo robot creado por la compañía de capacitación médica Gaumard Scientific; una nueva herramienta de entrenamiento, que, con un escalofriante realismo, está ayudando a entrenar a la próxima generación de médicos.
Diseñado para parecerse a un paciente masculino de 5 años, Hal es capaz de responder preguntas, seguir los dedos con los ojos, llorar por sus padres, decir “¡Ay!” cuando se lo pincha con una aguja, e imitar el síntomas de dolencias médicas variadas, que incluyen arritmia y paro cardíaco. Incluso, es capaz de mojar sus pantalones cuando tiene miedo, tal como lo haría un niño pequeño. No es extraño que sus creadores se refieran a él como “el simulador de pacientes pediátricos más avanzado del mundo”
La idea detrás de la implementación del uso de maniquíes es permitir que los estudiantes de medicina se familiaricen con todos los aspectos de su labor, desde la inserción de tubos traqueales en la garganta de un paciente hasta el uso de un desfibrilador, dándoles un modelo inanimado para que aprendan antes de pasar a una escena real.
Sin embargo, mientras que la práctica es una cosa, ser capaz de responder efectivamente bajo presión es otra muy distinta. Ahí es donde la idea de Hal se hace única, ya que muestra el comportamiento que los doctores podrían tener que enfrentar al tratar con pacientes reales más adelante en sus carreras, especialmente en situaciones de emergencia.