La guerra entre los asistentes de voz virtuales se libra en Las Vegas, donde el martes abre al público el mayor salón anual de electrónica, el CES, en el que se baten a duelo los líderes del mercado, Amazon y Google.
“La voz llegó para quedarse” en términos de interfaz de comunicación entre el hombre y la máquina, dijo el lunes Ned Curic, jefe de actividades automotrices de Alexa, la asistente de voz de Amazon.
Curic presentó en la víspera de la apertura oficial del CES una asociación con el proveedor francés de equipamientos para automóviles Faurecia. Así, los ocupantes de vehículos podrán dialogar a través de Alexa con su coche inteligente y conectado, para ajustar la temperatura, seleccionar música, etcétera.
Es fácil perder la cuenta de las empresas que anuncian la incorporación de un asistente virtual en sus dispositivos o sus sistemas: Panasonic, LG, Pioneer y muchos otros.
De acuerdo con la CTA, la asociación profesional que organiza el salón, el comando vocal combinado con los avances de la inteligencia artificial es la tendencia del momento en electrónica y seguramente se mantendrá todo este año, sobre todo a través de los altavoces conectados activados por voz, de los cuales se prevé vender más de 43 millones de unidades en 2018 solo en Estados Unidos, un aumento de 60%.
Con estos dispositivos, se puede pedir una pizza, hacer compras, escuchar los informativos, reproducir música y controlar todos los aparatos conectados de la casa (lavadoras, refrigeradores, lámparas, alarmas, puerta de entrada…). Gracias a la inteligencia artificial, estos asistentes aprenden en parte solos al interactuar con sus propietarios, a quienes se adaptan gradualmente.