Tengo la teoría de que el día que salga Fortnite para Android, Internet reventará. Todo el mundo habla de este famoso Battle Royale que, por el momento, y hablando de plataformas móviles, solo está disponible de forma oficial para iOS. Es cierto que hay algunas personas que pueden jugarlo ya en Android en una especie de beta privada, pero la aplicación, como tal, todavía no está disponible en todos los países. Donde sí está disponible es en Japón, por lo que la solución para descargar Fortnite en Androidsería tan sencilla como usar una VPN.
Si entras en Google Play te darás cuenta de que el top de aplicaciones gratuitas ha sido ocupado por aplicaciones de VPN. Por si alguno no lo sabe, una VPN permite, entre otras cosas, fingir que te estás conectando a Internet desde otro país, engañando así a los servidores de Google Play y “desbloqueando” el acceso a Fortnite. En primera instancia, podría parecer una solución viable para poder jugar al dichoso juego, pero lo cierto es que es una forma bastante absurda –por no decir otra cosa– de poner en riesgo tu privacidad. Es lo que he querido llamar ‘Efecto Fortnite’.
Cuando jugar a Fortnite está por encima de todas las cosas
Ya hemos hablado en más de una ocasión de que el rotundo éxito de Fortnite está siendo el anzuelo para un sinfín de estafas que buscan sacarte el dinero de la forma más vil y rastrera. La más reciente fue la del vídeo promocionado en YouTube que “enseñaba” a descargar Fortnite en Android, para lo cual era necesario meter tu número de teléfono en una web para “activar la verificación humana”. En realidad, lo que estabas haciendo era suscribirte a servicios de SMS premium que te podían llegar a salir por más de 30 euros al mes.
Esto, después de todo, es dinero, y el dinero se recupera. Perder 30 euros por un error no es lo peor que te puede pasar. Otro tema es tu privacidad. Si tu privacidad se ve expuesta, amigo mío, entonces sí que tienes un problema. ¿Y a qué viene esto? A que usar una VPN / Proxy cualquiera que te encuentres por Google Play es sinónimo de darle a un desarrollador todos los datos que quiera sobre ti sin apenas esfuerzo por su parte.
Las VPN más populares de Google Play, que son de pago, son seguras según un test llevado a cabo por el ingeniero en seguridad Paolo Stagno –puedes consultar la lista en este documento–. Sin embargo, el 23% de las VPN filtran información sobre el usuario, y un informe realizado por Panda afirma que 9 de cada 10 VPNs SSL (en teoría, seguras) utilizan tecnologías de encriptado inseguras o desfasadas. Eso significa que un hacker podría interceptar la información que se envía a través de esta VPN, descifrarla y hacer con ella lo que quiera.
Al menos las VPN son privadas y están cifradas (mejor o peor). El problema es que muchas de las apps que se anuncian como VPN en Google Play son, en realidad, proxys, y los proxys no deben estar necesariamente protegidos. Para que entiendas como funciona, imagina que, en vez de conectarte al servidor de Epic Games –desarrolladora de Fortnite– te conectas a mi ordenador, situado en Japón y, a través de él, te conectas al juego. Eres ánonimo para Epic Games, pero no para mí. Yo puedo ver toda tu información, todo lo que mandes y recibas, y seguro que no quieres eso. Podría robarte tus datos bancarios, tus cuentas de redes sociales y tu cuenta de correo, o peor, tu cuenta de Fortnite.
En definitiva, no te la juegues
Esto es lo que está provocando el ‘Efecto Fortnite’, que los usuarios prefieran poner en riesgo la integridad de sus datos con tal de jugar a un juego que saben que, tarde o temprano, acabará siendo lanzado en Android. Todo por ser impacientes y querer tenerlo todo aquí y ahora. Espera, no tengas prisa. Sabemos que Fortnite llegará a Android en verano, y cuando llegue y sea oficial te enterarás gracias a los medios especializados. No hagas cualquier locura con tal de descargar un APK, no metas tu móvil en ningún sitio y mucho menos te conectes a servidores de terceros cuya reputación no conoces. Sentido común ante todo.